7 cosas que nunca hago después de instalar Linux (y por qué tú tampoco deberías hacerlo)

Linux es un sistema operativo potente y fácil de usar que le permite hacer mucho más que con Windows. Sin embargo, hay algunas cosas que nunca debes hacer.

Es hermoso, es atrevido, es Budgie.

Puede encontrar los artículos "X cosas que hacer inmediatamente después de instalar Linux" en todas partes. Incluso escribí uno yo mismo.

Lo que no siempre ves son artículos que te dicen qué nohacer después de instalar el sistema operativo de código abierto, y yo estoy aquí para poner fin a esa sequía. ¿Por qué?

¿No se trata Linux de lo posible y no de lo imposible? Ciertamente lo es. Pero eso no significa que no se deba advertir a los nuevos usuarios sobre ciertas cosas. Con este tipo de advertencias, los nuevos usuarios están mejor preparados para tener una experiencia positiva con Linux, y es por eso que hago lo que hago.

Esto es lo que no debe hacer después de instalar Linux.

1. No agregues repositorios aleatorios

Los repositorios son ubicaciones remotas que albergan el software instalado a través del administrador de paquetes integrado. Por ejemplo, puedes instalar GIMP desde los repositorios predeterminados de Ubuntu con el comando sudo apt-get install gimp -y. Los repositorios predeterminados son aquellos que se configuran automáticamente de forma predeterminada.

Con la mayoría de las distribuciones de Linux, puede agregar todos los repositorios de terceros que desee. La gran pregunta es… ¿deberías hacerlo? Probablemente no. ¿Por qué? El hecho de que un repositorio esté disponible no significa que lo necesite o que sea seguro. Se han descubierto repositorios que contienen software malicioso. Por eso, solo agrego repositorios de fuentes confiables (como un proveedor conocido). Si se encuentra con un repositorio para una aplicación que quizás desee, pero no conoce al desarrollador ni a la empresa, investigue un poco antes de usarla.

2. No inicies sesión como root

Érase una vez, era necesario iniciar sesión como root. Lo que no sabíamos era que hacerlo podría generar problemas de seguridad. Ahora, algunas distribuciones tienen la cuenta raíz (administrador) bloqueada. Ubuntu, por ejemplo, ni siquiera viene con una contraseña de usuario root, por lo que no se puede iniciar sesión como root a menos que habilite el usuario.

Si su distribución preferida le permite iniciar sesión como root, no lo haga. Si su distribución le permite su al usuario root, no lo haga. En su lugar, utilice sudo para obtener privilegios de administrador para un comando. Cuando el usuario root está habilitado, si alguien obtiene acceso a ese usuario, no hay nada que no pueda hacer en su sistema. En lugar de correr ese riesgo, nunca inicies sesión como root. Alguna vez. Período.

3. No elimines archivos aleatorios

Hay ciertos directorios en Linux que contienen archivos de configuración o de sistema muy importantes que causarían estragos en su máquina si se eliminaran. Los archivos en /usr/bin, /usr/sbin, /bin, /dev, /lib/, /sbin y /var deben considerarse intocables. Los archivos en /etc (que son archivos de configuración) sólo deben editarse si sabes lo que estás haciendo.

Eliminar cualquier archivo de esos directorios podría causar problemas que quizás no puedas resolver. Por lo tanto, incluso si su sistema tiene poco espacio en el disco, no toque los archivos en esos directorios. Si el almacenamiento interno de su máquina se está agotando, busque en su directorio ~/Descargas u otros lugares en HOME para eliminar archivos. Incluso entonces, elimínelo solo si ha realizado una copia de seguridad de sus datos.

Hablando de eso…

4. No ignores las copias de seguridad

Aunque Linux es increíblemente estable y seguro, es posible que sus datos no lo sean. Podrías borrar accidentalmente ese libro en el que has estado trabajando durante meses o un informe que debes entregar mañana. Errar es humano, por lo que es muy importante que hagas copias de seguridad de esos archivos importantes con regularidad.

Siempre configuro una copia de seguridad diaria automatizada para el directorio ~/Documentos. Debes hacer lo mismo con cualquier directorio que contenga archivos importantes. Afortunadamente, existen muchas soluciones de copia de seguridad GUI fáciles de usar (como Deja Dup) que hacen que este proceso sea muy sencillo.

5. No instale entornos de escritorio que puedan alterar el valor predeterminado

Solía instalar aleatoriamente todos los entornos de escritorio que parecían interesantes. En el pasado, era bastante fácil hacerlo sin preocuparme de que pudiera romper el DE predeterminado. Hoy en día, ese no es siempre el caso. Claro, puedes instalar la mayoría de las computadoras de escritorio en tu distribución favorita y estar bien. En este momento, tengo el escritorio predeterminado Pop! _OS y Budgie Desktop. El problema es que hay ciertos entornos de escritorio que pueden entrar en conflicto entre sí.

Por ejemplo, no puedo instalar Pantheon (tanto como me gustaría) en Pop!_OS sin que cause problemas con el valor predeterminado. Si instalo Plasma Desktop, lo más probable es que termine con entradas duplicadas para aplicaciones en el menú de mi escritorio. Debido a esto, siempre recomiendo a los usuarios que seleccionen una distribución que se ajuste de forma predeterminada al entorno de escritorio que desean. Si desea un nuevo escritorio, le sugiero que primero investigue un poco para ver si el nuevo escritorio entrará en conflicto con el predeterminado. Si hay conflictos, no ejecutaré la instalación.

6. No instale software de servidor en una computadora de escritorio

Si quisiera, podría instalar un servidor web, un servidor de base de datos, un entorno de contenedor, un CMS o casi cualquier cosa en mi escritorio Linux. Yo no hago eso. ¿Por qué? Hay varias razones.

En primer lugar, si necesita software de servidor, es mejor que utilice un sistema operativo de servidor (como Ubuntu Server, Debian Server, AlmaLinux, Fedora Server, etc.) porque esas distribuciones se crean específicamente para uso en servidores. Tienen mecanismos de seguridad y otro software diseñado para tales tareas.

En segundo lugar, no desea que su escritorio se atasque con procesos del servidor que podrían ocupar ciclos cruciales de la CPU. En tercer lugar, no desea que el software de su servidor se vea comprometido porque los usuarios habituales inician sesión.

Si necesita software de servidor (ya sea para su hogar o negocio), instale un sistema operativo de servidor en una máquina dedicada (o máquina virtual) y continúe desde allí. Lo mismo se aplica a una distribución de Linux centrada en el servidor, en el sentido de que no debes usarla como sistema operativo de escritorio.

7. No desactive SELinux o AppArmor

Hablando de seguridad, nunca desactive SELinux o AppArmor. ¿Por qué? Se trata de capas de seguridad muy importantes que cumplen un propósito muy específico que sería difícil de duplicar con otro software. He escuchado de muchos administradores que desactivan SELinux porque no entienden cómo funciona o no tienen tiempo para aprender a usarlo.

Cuando desactiva SELinux o AppArmor, sus sistemas se vuelven vulnerables a ataques. Simplemente no hagas esto. Alguna vez. Deje las medidas de seguridad en paz, para que Linux no se convierta en una responsabilidad. Desde el primer momento, Linux es bastante seguro, gracias a servicios como SELinux y AppArmor.

Y ahí lo tienes, las cosas que nunca hago con una nueva instalación de Linux. En realidad, nunca hago esto con ninguna instalación de Linux, sin importar cuánto tiempo lleva funcionando.